Mes ONCE

Hace ya bastantes lunas que no volteo a ver el cielo en la red. Es como olvidar una parte de la totalidad desde la orilla del ahora.
Como volar sin alas, como brillar sin luz, como escuchar el silencio en la larga noche de los tiempos.
De repente todo es rápido, casi instantáneo y fugaz.
En un momento puedes recordar toda una vida y al siguiente pestañeo todo ha cambiado... es distinto y nuevo.
Pero lo que determina si avanzas o retrocedes eres tú mismo, tus ideales y sueños proyectados en la pantalla del mañana.
Hablar de amor, tiempo, proyectos de vida y un sinfin de cosas más ya no es lo mismo que ayer. Las vibras son distintas y el aprendizaje en este tiempo nos recuerda que estamos vivos, que nuestras acciones conllevan responsabilidades. Que hay un lugar y sitio reservado en la tribuna para rendir homenaje a los astros y declamar nuestro poema, cantar una canción o simplemente contar una historia... la historia de nuestras vidas... esa que dibujamos cuando niños en un cuaderno.

Hoy la cuenta regresiva continua su trecho, es más agil y velóz pero aún tiene movimiento.
Seguiré un rato más aquí, pensando en lo que viene, en lo que ha pasado y en lo que ya no volverá; pero también es un buen momento para recordar y sonreír.

RDS